¿Cuál es nuestra identidad corporativa?, qué imagen proyectamos?, ¿cómo queremos que nos vean?; son sencillas preguntas pero que requieren de un plan.
Hay que observar además la integración con la comunicación interna, con la cultura organizacional y con nuestra visión y misión.
Desarrollar un plan implica definir cuáles son los objetivos de comunicación, definir una estrategia de medios y mensajes, como también el calendario de ejecución y como evaluaremos el propio plan.
La comunicación corporativa debe ser dinámica, planificada y concreta.